*[Mis curiosos]*

El castigo del cuervo blanco

-
Apolo y el cuervo
Nos cuenta Ovidio en su Metamorfosis (II, 542) que “en toda Tesalia no había mujer más bella que CORÓNIDE”, la hija del rey de los lapitas, Flegias. El dios Apolo, admirado por la hermosura de la muchacha no pudo evitar sentirse atraído por ella. Sin embargo, teniendo que marchar a Delfos para atender unos asuntos, se despidió de su amada, no sin antes cuidarse de dejar a un cuervo para que la vigilara. Poco tardó la bella Corónide, a pesar de estar ya embarazada de Délfico, en dar rienda suelta a su pasión con el que desde hacía tiempo le quitaba el sueño: el joven ISQUIS.
Algunos dicen que Apolo, ya antes de partir de viaje, se había enterado del engaño. Otros, apuntan a que fue su vigilante el que le dio la triste noticia. Ovidio (Met., II, 600-605) apunta que a Apolo el laurel se le cayó al escuchar el crimen de su amante, y a la vez se le escapa al dios el plectro y se le muda el semblante y el color; conforme le hervía el corazón de exaltada cólera, toma sus armas habituales, y teniendo el arco doblado en sus extremos atravesó con certero dardo aquel pecho que tantas veces había estado unido al suyo”. Pausanias (II.26.6), sin embargo, nos dice que fue Artémis, la que enterada de la deshonra a su hermano, mató a la joven. Sea como fuere, cuando la muchacha estaba siendo incinerada, Hermes fue el encargado de sacar de la pira funeraria donde ardía el cuerpo de la infiel al niño del que estaba preñada. Apolo lo llamó ASCLEPIO y le encomendó  a Quirón para que éste le enseñara el arte de la medicina.

El Olímpico, poco tiempo después, arrepentido por haber sido desbordado por una ira que le llevó a acabar con la vida de la mujer a la que amaba, maldijo y castigó al cuervo, portador de la mala noticia, tornándole, tanto a él como a su descendencia -antes “blanco como la plata y de las alas de nieve” (Ovidio, Met, II, 536-537)- en un ave negra, privándole, por tanto, de su puesto entre las aves blancas: “Su lengua charlatana le perdió (Ovidio, Met, II, 540)
--

Bibliografía:
*GRAVES, R: Los mitos griegos, Madrid, Ed. Alianza, 2002

Fuentes:
*APOLODORO, Biblioteca (Traducción y notas de Margarita Rodríguez), Madrid, Ed. Gredos, 1982.
*OVIDIO: Metamorfosis (Traducción y notas de Antonio Ruiz de Elvira), Madrid, Ed. Gredos, 1982.
*PAUSANIAS: Descripción de Grecia (Traducción y notas de María Cruz Herrero), Madrid, Ed. Gredos, 1982.
-

33 comentarios:

profedegriego dijo...

Pierre Grimal en su "Diccionario de mitología griega y romana" recoge que Corónide le fue infiel a Apolo y se casó con Isquis, porque se dice que temía que, cuando fuese vieja, el dios se cansase de ella y la abandonase. Caso parecido había sido el de Marpesa, nieta de Ares, que, prometida con Idas, el más fuerte y osado de los hombres según la "Ilíada", fue raptada por Apolo; Idas atacó al dios y sólo la interveción de Zeus hizo que se separaran. A la joven se le permitió escoger entre los dos pretendientes y ella eligió a Idas, temiendo también ser abandonada por Apolo cuando envejeciera.
Hay igualmente otra Corónide, hija de Coroneo, que fue transformada en corneja por su protectora Atenea, para ayudarla a escapar de las persecuciones de Poseidón, que estaba prendado de ella y la cortejaba.
Todo esto parece demostrar, C. G. Aparicio, que a veces los mortales hombres le ganan a los dioses por la mano... y por el temor de las mujeres a ser sustituidas en el corazón de sus amantes, inmortales y eternamente jóvenes, cuando la belleza y la juventud se hayan escapado. Conviene, pues, recordar y tener siempre presente el "tempus fugit" y el "Collige, virgo, rosas..." de Ausonio.
Espero haber contribuido a ampliar más, si cabe, tu estupenda entrada de hoy.
Mil saludos de "una" profe de griego.

Mari-Pi-R dijo...

Amores que matan, no mejor dicho, aunque la historia es bonita y a la vez triste.
Abrazos

Coral dijo...

@ Teuvo Vehkalahti:

I´ve just seen your blog and it´s really amazing!! Your photos are so good!!
I´m enjoying than you like my blog. You know that you´re invited to pass here when you want. +

Bye!

Coral dijo...

@ profedegriego:

Efectivamente, como bien dices, en el famoso "Diccionario de mitología" de Pierre Grimal se añade el dato del temor de Corónide a ser abandonada. Sin embargo, en las fuentes clásicas con las que he estado trabajando no encontré resto de ello, por lo que ignoré el dato de cara a elaborar la entrada.

Un magnífico recorrido por diferentes pasajes de la mitología el que nos haces en este comentario ¿Qué tendría Apolo que todas huían de él?... Recuerdo al "Apolo y Dafne" de Bernini e imagino al dios persiguiendo a mujeres que una y otra vez le rechazarían.

Muchas gracias, amiga, por colaborar con estos datos a enriquecer el contenido de la entrada.

Un abrazo!

Coral dijo...

@ Mari-Pi-R:

En este caso, sí, amores que matan... A Corónide le pudo su deseo y a Apolo su ira, lo que hizo que la historia acabara en tragedia.

¡Gracias por tu comentario!

Un abrazo!

Colotordoc dijo...

Me gusta como hay un aire poético, en como fue otorgado el color nego al cuervo.

Incluso con todo y "maldición" al cuervo.

Saludos

PACO HIDALGO dijo...

Duro el castigo del paradigma de la belleza y las artes para con su amada. En cuanto al cuervo, ser chivato nunca conduce a nada bueno. Atractiva e instructiva entrada. Un abrazo.

ATENEA dijo...

Me encanta la mitología griega. La leyenda del cuervo blanco es muy interesante. Ante una infidelidad no había compasión posible.
Un abrazo.

Coral dijo...

@ Manuel:

Es que la mitología griega tiene explicación para todo, o casi todo... y lo impregna con un aire poético único, :D

Un saludo!

Coral dijo...

@ PacoHidalgo:

... ya lo dijo Ovidio: "su lenga charlatana le perdió". Aunque él simplemente hacía lo que su amo le había encargado, velar porque la amada le fuera fiel, pero el carácter de Apolo... ay!

Un saludo, Paco!

Coral dijo...

@ Atenea:

... ante la infidelidad no había compasión ¡¡y menos si al que tenías enfrente era a un dios olímpico con ese carácter!!

Un abrazo, amiga!

Cayetano dijo...

Un blog muy interesante. Otro sitio donde perderme de vez en cuando y de cuando en vez.
Y gracias por tu comentario.
Cura ut valeas.

Coral dijo...

Me alegra que te guste este blog, Cayetano. Estás invitado a pasarte por él cuando gustes.

¡¡Bienvenido!!

Carolina dijo...

Sera por eso que dice el dicho "cuidado: no maten al mensajero"?
Es una historia fuerte pero todo sea por finalmente enterarme porque el cuervo es tan negro. Pobre avecilla de Dios...
Fuera de broma, muy interesante tu entrada como todas!
Besos.

Fotos Antiguas de Mallorca dijo...

Curiosa historia, los cuervos, segun la mitología griega antes eran blancos. Me lo apunto para soltarlo alguna vez a mis conocidos jejejee
Saludos madame.

Coral dijo...

@ Carolina:

Pues no estoy segura, pero puede que el origen del dicho venga de ahí. Posible es, :D

Un saludo, y ¡gracias por tus palabras!

Coral dijo...

@ Lorenzo:

Apunta, apunta... que para hacerte el interesante en un momento dado es útil, :D

Un saludo!

Uriel dijo...

Muy buena historia, y muy poética, como la del arco iris, que contaste no hace mucho. Por cierto, respecto de eso, al parecer Ovidio ya se me adelanto en eso de ponerle poesía a la historia ;), jaja.
Respecto de esta entrada, Apolo me recuerda a la historia de Viriato y el "Roma no Paga Traidores". Primero le da la orden y luego lo castiga por cumplirla...
Si no queremos saber la respuesta lo mejor es no preguntar.
Por cierto, por más que lo intento no logro imaginarme al cuervo plateado... Me es demasiado anormal... jeje.
Un Saludo.
Uriel

mariac dijo...

La traicion tiene a veces terribles castigos, tambien los mensajeros todos ellos perdieron algo. El hijo Esculapio fue salvado para curar y hacer el bien a los hombres como médico.
Un abrazo

Coral dijo...

@ Uriel:

No había pensado en esa asociación con el mítico "Roma no paga traidores", ¡muy agudo!

Me alegro que te haya gustado esta historia, Uriel.

Un saludo!

Coral dijo...

@ Mariac:

El traidor, tarde o temprano, lo acaba pagando... aquí un ejemplo.

Un abrazo, Mariac!

Ccasconm dijo...

Es curiosa la cantidad de historias sobre devaneos amorosos entre dioses y hombres con la que está plagada la mitología clásica. En este caso una mujer pone los cuernos a un dío. ¡A quién se le hubiera ocurrido tal atrevimiento sin temer por su vida!
Besos

Coral dijo...

¡¡La mitología griega está cargada de historias tan interesantes como esta!! Desde luego, los dioses no se aburrían...

Un abrazo!!

desdelaterraza-viajaralahistoria dijo...

Estas historias de la mitología clásica siempre me han gustado. Creo que tengo el librito de Graves, Dioses y hombres de la antigua Grecia, que no sé si es el mismo que citas en tus fuentes; pero lo leí hace tanto tiempo que muchas de sus historias las recuerdo incompletas. Me ha picado el gusanillo y le daré un repasillo. Muy, pero que muy interesante y ameno tu artículo. Y otro saludo también al profe de griego, que visita mi blog de vez en cuando y no he podido devolverle la visita porque no sé que blog tiene. Un abrazo.

Coral dijo...

¡¡Me alegra que con este post te haya vuelto a picar la curiosidad sobre la mitología griega!! Es imposible aburrirse con las historias que de los dioses se nos cuentan...

Y aprovecho que has sacado el tema, para decir también a "profedegriego" que yo tampoco sé que blog tiene, y animarla si no se ha metido de lleno en el mundo blogger a que se haga uno porque seguro que tiene cosas muy interesantes que contarnos.

Un saludo!!

profedegriego dijo...

Estimados C.G. Aparicio y DLT, quiero daros, en primer lugar, las gracias por vuestros amables comentarios y por permitirme entrar en vuestros blogs con el magnífico trampolín que son vuestras entradas, siempre tan amenas, interesantes y tan bien documentadas; gracias también por la confianza que depositáis en mí como futura autora de blog, espero no defraudar vuestras expectativas. Efectivamente aún no lo tengo , pero ando ya en ello, animada porque lo que sí tengo decidido es el tema: ROMA, mi ciudad Eterna, "aperta", antigua y moderna, barroca y contemporánea, medieval y renacentista, llena de contrastes pero siempre bellísima, fascinante. Será pronto, estoy dándole vueltas, sólo espero que no sea... "el parto de los montes". Os mantendré informados y, como Cicerón, comenzaré con una "captatio benevolentiae".
Con respecto a la mitología clásica hoy mismo he disfrutado en mis clases y con mis alumnos de varios de los episodios amorosos de Zeus, que tanto juego nos han dado en su narración como en las imágenes (bendito google!) y, pese a ser las últimas horas de clase del viernes, se nos han pasado volando, mezclando, como decía Horacio, lo útil con lo dulce.
Mil cariñosos saludos a ambos, amigos.

Coral dijo...

¿¿Osea que dentro de nada tendremos en el universo blogger un nuevo blog con el que poder descubrir la maravillosa Historia de Roma?? No sabes la ilusión que me hace, puesto que para mí, la "ciudad eterna" es una debilidad, y no sólo en lo referente a la Antiguedad, sino en otros muchos periodos que bien has citado en el comentario.

Te noto cargada de ilusión, y eso es lo más importante para empezar ese nuevo proyecto. Seguro que será un blog maravilloso, no lo dudes.

¡¡Mucha suerte!! y ya nos informarás del "nacimiento la criatura", :D

Un abrazo!

La Dame Masquée dijo...

O sea, que al final fue el pobre cuervo el que pagó el pato. Ventajas que tiene ser un dios: siempre se puede hacer pagar a otro los propios errores.

Madame, me tomo unas vacaciones, pero me despido solo hasta pronto.

Buenas noches

Bisous

Coral dijo...

Pues así fue, madame, el pobre cuervo fue el que se cargó con la culpa (bueno, la amante también salió perdiendo, no lo neguemos)

¿Se toma unos días libres? Espero que le sirvan para relajarse y descansar.

Un saludo, y ¡hasta pronto!

Uriel dijo...

Hola de nuevo C.G. Pasaba a decirte que te he dejado un premio en mi blog.
Un Saludo.
Uriel

Coral dijo...

¡¡Muchas gracias Uriel!! Es todo un placer que me hayas elegido para darme este premio.
Enseguida me pongo con la creación de la entrada..., :D

Un saludo!!

Jose Manuel Iglesias Riveiro dijo...

Siempre pasa lo mismo la culpa para el que esta abajo, aunque el dios se equivoque es el cuervo el que lo paga.
Un abrazo.

Coral dijo...

¡¡Las cosas no cambian ni entre los dioses de la mitología!!

Un saludo y ¡gracias por tu visita!

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...